La finca pública de Albarca y es Verger, integrada en el conjunto
del Parc Natural del Llevant, fue adquirida por el Govern de les
Illes Balears en marzo de 2000. Casi dos años después de esta
compra y, en consecuencia, del paso de este espacio a manos
públicas, Albarca y es Verger tienen su actividad recreativa
ralentizada. En este sentido, la elaboración de rutas
excursionistas por el interior de las fincas y de material
didáctico, así como la señalización y rotulación de carteles e
indicadores de dirección están sin desarrollar.
También quedan por activar proyectos como un centro de
interpretación, que en un principio se ubicará en la entrada de sa
Tudossa, y ampliar el funcionamiento del refugio de s'Arenalet, que
la Conselleria tenía la intención de tener en servicio ya en estas
fechas. Según el departamento de Medi Ambient, dirigido por
Margalida Rosselló, el temporal de los días 10 y 11 del pasado mes
de noviembre ha retrasado la confección de las rutas y del resto de
actuaciones antes.
Asismismo hay que destacar que la privacidad de uno de los dos
caminos de acceso a Albarca, es Verger y s'Alqueria Vella, el Camí
de sa Vinyassa, restringe el paso a los visitantes. La causa de
dicha restricción se basa en las desavenencias entre la Conselleria
de Medi Ambient y el propietario de la posesión afectada, un
ciudadano argentino. Éste se muestra reticente a la hora de
permitir la entrada de personas con fines recreativos. No obstante,
sí que ha dejado y sigue dejando pasar a grupos de caballistas y
determinados colectivos concertados, además de los excursionistas
que pernoctan en el refugio de s'Arenalet durante el verano y
afines.
Esta vía dista aproximadamente un kilómetro y medio del espacio
público y las barreras están permanentemente cerradas. Justamente,
sa Vinyassa era el acceso más conocido y transitado por los
artanencs. Ahora debe desviarse hasta la única entrada oficial, el
Camí de sa Tudossa, que confluye hasta Albarca, es Verger y
s'Alqueria Vella. Esta vía está en peor condiciones que la de sa
Vinyassa, ya que los vehículos tienen que salvar más desniveles y
pendientes.
En opinión de un guardia forestal, a pesar de que este camino
esté más lejos y tenga peor accesibilidad a las fincas públicas, es
la mejor entrada que distribuye los distintos puntos de visita: las
casas de es Verger, es Refugi de s'Arenalet y otros puntos de
interés como la torre de Albarca y las playas vírgenes. El alcalde
de Artà, Montserrat Santandreu, ha manifestado a este periódico que
«el acceso a Albarca, es Verger y s'Alqueria Vella ha estado
siempre abierto. Otra cosa es que quieran ir con coche, pretensión
prohibida a partir de las barreras de las casas de es Verger, donde
deben contactar con un guardia».
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