El edificio de la Cruz Roja de Cala Millor será objeto de una
rehabilitación integral para reconvertirlo en un centro cívico que
albergará un departamento para la Guardia Civil, una oficina de
información turística, una sala para los primeros auxilios y unos
baños públicos. Esta rehabilitación se podrá llevar a cabo gracias
al convenio de colaboración entre los ayuntamientos de Sant Llorenç
y Son Servera. El primero se ha encargado de redactar el convenio y
presentar la tramitación ante la Demarcación de Costas, mientras
que el segundo se ha encargado de la redacción del proyecto,
adjudicar las obras y solicitar una subvención a la Conselleria de
Turismo.
El alcalde de Son Servera, Damià Ripoll (PP), ha explicado que
«este convenio entre los dos ayuntamientos se firmó en la
legislatura anterior, por lo que el proyecto ya está muy avanzado».
Según Ripoll, «la reforma prevé dos edificios unidos por una
pérgola de vidrio, para que se pueda ver el mar. De esta forma,
será mucho más atractivo y cuando la gente vaya a la playa no se
encontrará con la pared que impide ver el paisaje. A pesar de esto,
el inmueble no crece y se utilizará sólo la superficie construida»,
matizó Ripoll.
El proyecto ha sido elaborado por Catalina Pascual, una
arquitecta de Cala Millor que ha sabido captar la idea de los dos
ayuntamientos. El presupuesto asciende a unos 240.404 euros y la
intención es que se pueda costear a tres bandas: ayuntamientos de
Sant Llorenç y Son Servera y la Conselleria de Turismo. La
previsión es que las obras puedan estar terminadas antes del mes de
abril.
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