Imagen de uno de los pozos que suministra agua a la red municipal de Pollença.

Imagen de uno de los pozos que suministra agua a la red municipal de Pollença.

Elena Ballestero14/12/03 0:00
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Cuatro nuevos pozos reforzarán este verano el suministro de agua a Pollença, a falta de adjudicarse las obras de construcción de la desaladora de Alcúdia y una vez que el Govern balear ha descartado completar el denominado eje transversal de aguas de Mallorca, que debía canalizar el agua sobrante de los acuíferos de Crestatx y sa Marineta hasta Pollença y el Moll para garantizar el suministro de agua en las épocas de escasez, principalmente en los meses de temporada alta. El alcalde de Pollença, Joan Cerdà (UM), y el regidor de Medi Ambient, Joan Comas (PP), tienen previsto reunirse la próxima semana con el director general de Recursos Hídrics para acelerar la conexión de al menos dos de estos pozos que ya deberían formar parte de la red municipal de aguas.

A finales de la pasada legislatura, Govern balear y Ajuntament acordaron la excavación de dos nuevos pozos de agua potable en la finca de Son Vila que debían formar parte del citado eje transversal de aguas de Mallorca. Los pozos fueron excavados y la canalización hasta el depósito municipal fue adjudicada antes de elecciones pero no ha llegado a completarse. Primero, hubo problemas con la calidad de las aguas en uno de los pozos y, más tarde, tras descartarse la inclusión de dichos pozos en el eje transversal de aguas, se replanteó si la inversión prevista resultaba realmente rentable. Así las cosas, finalmente el Ajuntament de Pollença ha modificado el proyecto de conexión de los pozos de Son Vila reduciendo notablemente el diámetro de la tubería prevista que ahora no tendrá que asumir el caudal de Crestatx, lo que también minimiza el coste económico.

De esta manera, el sobrante de la partida económica prevista para esta canalización se reinvertirá en la excavación y canalización de un nuevo pozo en la zona del Vall den Marc, en Can Sionet, subiendo a Lluc. Se reducen, además, las posibilidades de salinización de dichos pozos al recurrir a dos acuíferos diferentes. De los dos pozos excavados en Son Vila sólo uno de ellos da un caudal suficiente con calidad adecuada para el consumo, de modo que el Ajuntament negocia ahora con los propietarios de dos pozos privados de esta zona la posibilidad de arrendarlos para conectarlos también al depósito de Can Puig. «Estamos preocupados de cara al verano, por eso tenemos prevista una visita esta misma semana al director general de Recursos Hídrics para asegurar que las obras estarán listas a tiempo», dijo el alcalde de Pollença, Joan Cerdà. El alcalde Cerdà confirmó también que si un futuro gobierno autonómico decidiera recuperar el proyecto original de conexión del eje transversal de Mallorca la tubería que ahora se modifica y que unirá los pozos de Son Vila al depósito municipal seguiría siendo aprovechable, si bien es cierto que conduciría un menor caudal de agua hacia el pueblo.