Los hoteleros de Muro se han comprometido a pagar los terrenos para
la construcción de la futura depuradora de Can Picafort y que están
valorados en 180.000 euros. Así lo confirmaron ayer el teniente de
alcalde de Muro, Onofre Plomer (PP), y el delegado de Can Picafort,
Miquel Ordinas (CPU), tras años de disputas entre ambos municipios
por lo que se refiere a la depuración de sus aguas sucias.
Actualmente, Muro y Can Picafort comparten una única depuradora
construida hace quince años en terrenos del parque natural de
s'Albufera que entonces compraron los hoteleros de Can Picafort.
Entonces, una depuradora era suficiente para depurar las aguas
sucias de Playas de muro y Can Picafort pero el incremento de
plazas turísticas disparó el caudal y comenzaron a aparecer
problemas de malos olores y salidas de aguas sucias al mar.
En 2001, Govern balear, Ajuntament de Muro y Consistorio de
Santa Margalida, del que depende el núcleo urbano de Can Picafort,
firmaron un principio de acuerdo por el que este último renunciaba
a una posible ampliación de la depuradora de Muro y aceptaba que el
Govern construyera una nueva estación en Can Picafort a cambio de
que se realizaran una serie de obras de urgencia que acabaran con
los escapes de aguas sucias en el tramo de tuberías que conectaba
Muro y Can Picafort.
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