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El titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Palma, Enrique Morell, ha dictado un auto por el cual requiere a los acusados de un supuesto delito de injurias y calumnias, Joaquín Rabasco, concejal de Llucmajor y presidente de ASI, y al periodista Francisco Rubén Avila, para que presten fianza de 100.000 euros para asegurar las responsabilidades pecuniarias del pleito.

Un juzgado de lo Penal celebrará el juicio oral por la querella presentada por el ex militante de ASI, Alfonso Céspedes, defendido por el abogado Juan Carlos Rebassa, en contra de Rabasco por los conceptos vertidos en su contra en el libro autobiográfico «Joaquín Rabasco, vivencias», escrito por el periodista contratado por el concejal de Llucmajor. Rabasco ya declaró como imputado el pasado año a raíz de unos comentarios que aparecen en su libro sobre Céspedes, al que califica de «reprimido sexual».

En la biografía también acusaba a su ex colaborador de aprovecharse de la enfermedad terminal que sufría un compañero suyo, y de las malas relaciones que tenía en aquellos momentos con su familia, para hacerle firmar un documento por el que le cedía todos sus bienes. Rabasco declaró ante el juez Enrique Morell y explicó que para él la palabra reprimido sexual había que equipararla a la de «santo». Señaló al juez que la edición la pagó él y que editó este libro para «contrarrestar la mala imagen que se le había dado para fines políticos» en las localidades donde se presentaba ASI.