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El 70 por ciento de los residuos se recogen de forma selectiva en el municipio de Puigpunyent para su posterior reciclaje y elaboración de compostaje. Y sólo un 30 por ciento de los residuos se envían al vertedero de Son Reus o a la incineradora.

Puigpunyent ha conseguido dar un giro a los datos que predominan en Mallorca dos meses después de iniciar la recogida selectiva de la materia orgánica. Esta recogida se suma a la que llevaba aplicando desde hace años de papel, vidrio y envases.

Aina Llauger y Miquel Angel March, miembros del GOB, y el socialista Miquel Ramon, regidor del Ajuntament, presentaron ayer estas estadísticas. En Mallorca, según datos de 2003, sólo se recicla el 13,4 por ciento de los residuos y van a parar al vertedero y a la incineradora el 86,6 por ciento.

En Puigpunyent, en cambio, se ha puesto de manifiesto que se puede emprender una política de residuos que permita no sólo no poner en marcha los dos nuevos hornos, sino reducir a la mitad los actuales. De hecho, los vecinos de este municipio de la Serra aportan a la incineradora y al vertedero 0,4 kilos por persona y día, mientras que el resto de habitantes de la Isla aportan cinco veces más, dos kilos por persona y día.

Miquel Pastor indicó ayer que esta experiencia repercutirá en los recibos de basura que pagan los residentes de Puigpunyent: «Se devolverá el dinero que nos ahorremos en la incineración, pero nuestro objetivo en 2005 es confeccionar una tasa más justa, primando a los que generen menos basura y a los más desfavorecidos».

Pastor hizo hincapié en que el éxito de la recogida selectiva en Puigpunyent se debe a los propios ciudadanos quienes crearon un grupo de soporte y decidieron cómo llevarlo a cabo. El modelo lo tomaron de varios municipios de Catalunya, por lo que a su juicio se podría aplicar en municipios con mayor población de la Isla. Llauger afirmó que Puigpunyent sólo cumple con el Plan Director de Residuos Sólidos.