Los alumnos del nuevo instituto de enseñanza secundaria de
Binissalem tendrá que convivir con obras durante las primeras
semanas del curso escolar. A falta de un mes para el inicio de las
clases el Instituto, cuyo edificio principal aunque sin recepcionar
ya está prácticamente finalizado, está situado en medio de un
descampado sin calles de acceso, patio o exteriores. Tampoco
dispone de mobiliario ni teléfono.
Así lo explicaron esta semana la regidora de Cultura de
Binissalem Apol·lonia Crespí y el director del centro, Gabriel
Fiol. Esta será la primera vez en la que los alumnos de primero y
segundo de ESO de las localidades de Binissalem, Alaró y Consell
acudan a un instituto público dado que hasta ahora debido a la
falta de espacio en el instituto de Inca, continuaban cursando sus
estudios en los centros escolares de infantil y primaria de sus
respectivos municipios.
El nuevo instituto público de Binisssalem tiene capacidad para
siete unidades, es decir, entre 450 y 500 alumnos, según explicó su
director, Gabriel Fiol. «Comenzaremos con 235 alumnos matriculados
cuatro primeros, tres segundos y tres terceros aunque el número de
alumnos por curso dependerá de los exámenes de septiembre», dijo
Gabriel Fiol. La distribución de alumnos en función de sus
localidades de orígen será la siguiente: 104 de Binissalem, 76 de
Consell y 65 de Alaró.
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