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El departamento de Vías y Obras del Ajuntament de Calvià ha sacado a concurso la adjudicación de las obras correspondientes a la mejora de los pasos peatonales del Passeig de Calvià.

Según fuentes del área municipal que gestiona Isidre Cañellas (UM), las mencionadas obras tienen por objeto rebajar la altura y la pendiente de seis pasos peatonales que interconectan el Paseo de Calvià en el tramo que discurre entre Son Caliu y Costa den Blanes.

Con la suavización de estos pasos de cebra -cuya elevación sobre el nivel convencional de la capa de rodadura sirve para que los vehículos reduzcan su velocidad-, Unió Mallorquina (UM) atenderá a las reivindicaciones del colectivo de taxistas del municipio, contribuirá a evitar accidentes de tráfico y cumplirá una de sus promesas electorales.

Las mismas fuentes nacionalistas explicaron ayer a este diario que la abrupta elevación de los pasos peatonales ocasiona averías en las amortiguaciones de los automóviles en general y los taxis en particular. Esta misma excesiva elevación de la calzada -pero sobre todo el deterioro y desprendimiento de los adoquines que la cubren- también ha provocado que en los últimos meses varias personas hayan perdido el control de los ciclomotores que pilotaban al transitar por esta zona.

Las obras de mejora de los pasos peatonales elevados del Passeig de Calvià sustituirán el adoquinado por una superficie asfáltica más amable para el rodar del tráfico, sin que con ello, la legalidad de la infraestructura y la seguridad de los peatones se vean mermadas.