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Los vecinos de la zona de la plaza del monumento de Porto Cristo han recogido unas 800 firmas denunciando la peligrosidad y el nuevo diseño de este enclave que ha sido renovado tras la eliminación del símbolo franquista. Recogiendo las quejas vecinales, la coalición EU-EV presentará una instancia en el Ajuntament de Manacor reclamando una modificación «urgente» de la zona que pase por habilitar zonas verdes y reducir la inseguridad que provocan los relieves que se han construido. En este sentido, desde EU-EV, Manel Carmona, explicó ayer que «esta plaza habría estado muy bien en otro lugar pero aquí no porque es una zona masificada donde tendría que haber una espacio plano y zona verde que facilitara el esponjamiento y el acceso de los vecinos», apuntó.

Carmona añadió que «hay una serie de elementos que la hacen inaccesible, peligrosa e insegura por la proximidad de la calle donde pasan vehículos contínuamente». A todo esto, hay que añadir que «los relieves son utilizados por los jóvenes para hacer skate y el propietario del bar de la plaza ha tenido que hacer seis intervenciones con su botiquín a heridos». El proyecto de la nueva plaza tras el derribo del monumento ha sido realizado por el arquitecto municipal a quien Carmona libra de cualquier responsabilidad porque «obedeció a criterios políticos, él no tiene la culpa».

Por su parte, el regidor de AIPC, Joan Gomila, admitió estar preocupado también por la peligrosidad que supone este espacio. De hecho, informó que «ayer mismo -por anteayer- nos reunimos con el arquitecto y los contratistas para hablar de ello y decidimos colocar una barandilla para garantizar la seguridad». Así mismo añadió que «sembraremos romero en las jardineras para que la tierra no se esparza como sucede ahora». Gomila asegura que tras haber colocado los bancos y el mobiliario que falta «será difícil que los niños hagan skate y, además, mejorará la imagen de la plaza». Sobre los relieves que son la parte más criticada y que más llama la atención de la plaza, el regidor recurrió al «sobre gustos no hay nada escrito».