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GUILLEM MAS
El celador municipal de ses Salines, Sebastià Escalas, firmó el certificado de antigüedad de más de 26 años de la casa rústica del ex alcalde Sebastià Vidal, sólo dos meses después de que se le aprobase un aumento de sueldo de 500 euros mensuales en noviembre de 2004. Este aumento también favoreció al secretario Joan Burguera. Cabe recordar que dicho certificado sirvió para que Vidal solicitase el interés general como sede de la Agrupación Caballista de ses Salines, origen del escándalo urbanístico que ha supuesto, por ahora, la imputación de 11 alcaldes y regidores del PP y del propio celador.

Según ha podido saber Ultima Hora, la tramitación y adjudicación de la plaza de celador a Sebastià Escalas se podría haber realizado de «manera irregular». Un hecho que lo corrobora es que el mismo Escalas, el pasado 7 de abril de 2006, y en declaraciones al juez por la trama, dijo que no sabía qué procedimiento había seguido para conseguir su plaza. Reconoció no haber hecho ningún examen. «Sólo formulo denuncias urbanísticas si me lo manda el alcalde o el regidor», dijo.

El celador comenzó a trabajar en el Ajuntament en 1993 a media jornada. En 1994 ocupó una plaza laboral como encargado de obras a jornada completa. Los requisitos para su puesto fueron ser arquitecto o aparejador con un año de experiencia o maestro de obras. Escalas sólo aportó justificantes de la Seguridad Social y una acta del IAE. No presentó ningún título que justificase tener estudios.