Margalida Reus es la mujer más mayor de Mallorca y, a pesar de su edad, conserva una salud de hierro. Esta fradina sube la compra todos los días por las calles en cuesta de Biniamar sin necesidad de utilizar siquiera un bastón. Ella misma reconoce que lo único que le falla es la vista y, cuando se le pregunta por el secreto de su longevidad, se remite a Dios y a su genética. «Mis dos hermanas también llegaron a los cien», cuenta orgullosa.
Margalida vive con su sobrino, Pep Reus, que le ayuda «en lo que se deja», pues a ella le gusta poner lavadoras, limpiar y hacer de las suyas para no estar quieta. Esta mujer que ha conocido tres siglos y ha viajado a Francia, Barcelona y Valencia, fue una amante de la lectura y vivió muchos años cuidando a sus familiares.
Sus sobrinos cuentan que su tía nunca se ha cuidado demasiado. «Pesa 35 kilos y siempre ha estado muy delgada aunque come mucho», admite su sobrina política Catalina Coll.
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