Mateu Cladera da el pistoletazo de salida a las populares fiestas de la Beata

Mateu Cladera, que fue durante años redactor del diario Baleares y jefe de prensa del aeropuerto de Son Sant Joan, y actualmente es colaborador de Ultima Hora, dio ayer el pistoletazo de salida a las populares fiestas de la Beata, en su localidad natal, Santa Margalida. Fuertemente comprometido con las costumbres de su pueblo, Mateu Cladera inició su carrera periodística como corresponsal del diario Baleares en la Vila cuando la cabecera pertenecía al régimen franquista. Ya entonces disfrutaba escribiendo de la procesión más típica de Mallorca de la que fue un verdadero motor participando en la elaboración de numerosas carrozas. Durante el pregón de ayer noche, que fue muy emotivo y aplaudido, Mateu Cladera quiso recuperar un cuento con el que el maestro de escuela Guillem Cantallops ilustró el pregón de la Beata ya en el año 1972: «Sa padrina i el picarol». Pero además Cladera conmovió al público asistente con su manera de sentir y vivir la fiesta que supo transmitir a través de un cuidado discurso: «Noche de septiembre engalanada de templanza, por los bosques y montañas florece el romero y en la plaza mayor de nuestro pueblo hay una imagen sagrada, bronce que late y que con una sonrisa dulce mira a los hijos de un pueblo que se unen amorosamente para hacerle la corona diamantina de la procesión más típica de Mallorca». No faltaron tampoco las alusiones adimoni y a las gerres con la intención de lanzar un mensaje de esperanza ante la fatalidad. «Que sigan floreciendo la esperanza y el amor dentro de cada corazón. Y cada vez que el demonio rompa una gerra, que migerres nuevas se llenen en nuestro corazón donde uno, de tanto encontrar corazón, deja su corazón para siempre, como yo y como todos los que llegan a latir con nosotros». Será el próximo domingo 3 de septiembre cuando los vecinos de la Vila se vistan de fiesta para escenificar un año más la que se conoce como la procesión más típica de Mallorca. Entonces miles de personas llegadas de toda la Isla se sumarán al ritual que se repite desde tiempos inmemoriales el primer domingo de septiembre.