El pleno debía aprobar las personas que integrarán este consejo. Onofre Ferrer ha sido designado junto a Josep Maria Salom como una de las dos personalidades de prestigio reconocido en el campo de la educación.
La regidora Mercant abandonó el pleno y se quedó entre el público junto a su marido mientras se debatía el punto al ser parte implicada. El regidor del PSM, Sebastià Gayà, abrió las críticas: «Creo que es poco ético por parte de la señora Mercant, tendrían que poner personas bien preparadas».
Para Júlia Roman (PSOE), «no es legítimo que una persona que tiene una relación de pareja con la regidora ocupe este puesto, está claro que es un nombramiento político».
Miquel Àngel Grimalt (ALM-UM), tras recordar que Ferrer fue uno de los hombres del PP que negoció el plan general con su partido, apuntó que «la regidora de cultura no tiene que nombrar a su marido y más si se trata de una persona muy activa dentro del PP». Grimalt recordó que «el objetivo era evitar la politización».
Jaume Darder (PP), contestó que a Onofre Ferrer «no lo nombra la regidora de Cultura sino el pleno» y apuntó que «tiene suficiente curriculum como para estar en el consejo escolar». Darder recordó a la oposición que el puesto de Ferrer en este organismo no está remunerado.
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