La caída de parte de un voladizo del cementerio de Algaida obligó a cerrar el paso y apuntalar toda una ala del camposanto municipal. El derrumbe provocó además la ruptura de quince losas de nichos.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado martes cuando las vigas de la pared voladiza que está colocada a modo de pasillo protector sobre los bloques de nichos, se derrumbó y provocó la ruptura de las losas. Por fortuna, no hubo que lamentar daños personales.
Ante una posible caída del resto del voladizo y para evitar daños mayores, el Ajuntament de Algaida decidió apuntalarlo y precintar toda el ala. El alcalde de Francesc Miralles (PSOE) explicó que en los próximos días se procederá al derribo de todo el voladizo ahora apuntalado y que en una próxima intervención en el cementerio, será repuesto.
En cuanto a los daños en las losas de los nichos, Miralles explicó que su reposición correrá a cargo del Ajuntament d'Algaida y que los propietarios afectados han sido informados de lo sucedido y de las medidas que se emprenderán.
Según informó al alcalde el arquitecto municipal, la caída del voladizo construido junto a esta ala en una ampliación del cementerio ejecutada hace unos 20 años, se debió al mal estado de las vigas causado por filtraciones de agua. «Parece que en su momento no se tuvo en cuenta la evacuación del agua y la humedad fue afectando las vigas. Estos días con los cambios de calor de día y frío de noche, finalmente han cedido y se vinieron abajo», declaró Miralles, quien añadió que «por suerte todo sucedió de madrugada cuando no había nadie en el cementerio».
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