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A. BASSA El Ajuntament de Capdepera está negociando con los propietarios, la paralización de la demolición del emblemático edificio de ca ses Monges, ubicado en la calle Gómez Ulla, para evitar su conversión en una nueva promoción de 16 pisos.

El edificio fue levantado en 1891 y destinado a las monjas franciscanas que residieron en la localidad hasta finales de los 90.
Posteriormente una inmobiliaria adquirió este edificio con la intención de construir un bloque de viviendas. Así, la constructora solicitó una licencia de demolición que fue otorgada por el anterior equipo de gobierno (PP-Es Grup) en abril de 2005, pese a una fuerte oposición vecinal que exigía la conservación de este emblemático edificio histórico.

Ahora, el actual equipo de gobierno (PSOE, UCAP-UM, EU-EV y PSM-Entesa) quiere intentar conservar este edificio. El regidor de obras, Mateu Garau explicó que «estamos en negociaciones con la promotora para ver si podemos llegar a un acuerdo y dar marcha atrás en la paralización. También los técnicos deben estudiar la manera adecuada de proceder ya que hay una licencia otorgada».