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GUILLEM MAS Un informe de investigación del Colegio Oficial de Arquitectos de las Balears ha desvelado que una suma importante de licencias de obra en el Port Verd fueron concedidas de manera irregular durante el pasado mandato de Damià Ripoll (PP).

El alcalde Josep Barrientos y el delegado de Urbanismo, Joan Riera, han dado a conocer el contenido el estudio. En concreto, Barrientos cifró entre «250 y 350 viviendas» cuyas licencias «no se adaptaban a la normativa pero si al proyecto», argumentando que este crecimiento urbanístico supondría unas 1.800 personas más «en el Port Verd que es un lugar de pequeñas dimensiones».

Riera argumentó que «las licencias son irregulares, ya que la urbanización del Port Verd no cuenta con un servicio de agua ni alcantarillado en condiciones como para garantizar su servicio». Cabe recordar que hace unos tres meses, el nuevo gobierno municipal aprobó una suspensión de licencias en varias zonas del municipio y, por extensión, en el Port Verd.

Ahora, el Ajuntament tiene previsto negociar las licencias que están concedidas, pero que todavía no han sido iniciadas «para disminuir sus densidades» y limitar el techo poblacional en el Port Verd.

Según Riera «por responsabilidad, iniciaremos un proyecto para dotar de agua potable y alcantarillado en condiciones para que las licencias estén concedidas de manera adecuada, dotando así de servicios la zona, y conceder los finales de obra que se nos piden y que no podemos dar por responsabilidad».

Para ello, Urbanismo estudia la posibilidad de sufragar las obras cobrando contribuciones especiales a los vecinos y por medio de aval a las futuras construcciones.

El alcalde Barrientos avanzó que «durante los seis meses anteriores a las elecciones de mayo, el Ajuntament se convirtió en una auténtica máquina de conceder licencias. Se daban licencias como rosquillas. Algunas se concedieron en sólo quince días o en un mes, mientras otras esperaban casi un año».

Ante estos hechos, tanto Josep Barrientos como Joan Riera descartaron acudir a la Fiscalía para informar de los hechos, ya que «depende de otras instancias». «Nosotros no juzgamos. No es cosa nuestra. Sólo informamos sin buscar responsabilidades jurídicas. Cada uno tiene que asumir lo que ha hecho».

Alcantarillado
El brutal aumento de población que ha sacudido el Port Verd durante los últimos meses ha provocado estragos en la precaria red de alcantarillado y en la red de agua.

Se ha llegado a tal punto de presión que las alcantarillas están a punto de reventar ya que la red no está preparada ni acondicionada para tanta ocupación.

Desde el Ajuntament se alerta que se está rozando la posibilidad que, muy pronto, las calles del Port Verd se llenen de aguas residuales. Por ello, es necesaria una urgente actuación del Ajuntament de Son Servera para evitar una triste estampa en el Port Verd.