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MARGALIDA RAMIS Cerca de 200 personas entre padres y alumnos se manifestaron ayer por las calles de Binissalem para pedir una nueva escuela. La manifestación fue convocada por la asociación de padres y madres (APIMA) del colegio público Nostra Senyora de Robines y fue la presidenta del colectivo, Fanny Bauzà, quien leyó un manifestó en el que pedía a la Conselleria d'Educació que actúe para que la nueva escuela esté lista para el curso 2009-2010, además de denunciar la precariedad en que se encuentra el actual centro.

No obstante, también agradeció la buena predisposición de la actual consellera d`Educació, Bàrbara Galmés, aunque remarcó que «queremos hechos y no palabras». Fanny Bauzà explicó que «no podemos relajarnos a pesar de las buenas palabras del Govern, porque ya en 2007 el anterior gerente del Ibisec Rafael Bosch se comprometió ante los padres a empezar las obras del nuevo colegio durante el 2007 y no ha sido así».

La presidenta de la asociación indicó que «actualmente tenemos 6 aulas prefabricadas y para el próximo curso necesitaremos otras dos más». «A día de hoy la escuela acoge 450 alumnos, la situación es insostenible», añadió Fanny Bauzà.