El Consell ejecuta obras de emergencia en las carreteras dañadas por las lluvias

Las brigadas de carreteras del organismo insular trabajan en concreto en los municipios de Esporles y Puigpunyent. A mediados del pasado mes de octubre, sobre Esporles y Puigpunyent cayó una fuerte tormenta. Un helicóptero de la Guardia Civil tuvo que rescatar a 23 personas que quedaron atrapadas en once coches y un camión en la carretera de Puigpunyent. En la urbanización de Son Serralta del municipio las consecuencias fueron trágicas al morir una turista cuyo coche fue arrastrado por la riada.

Las lluvias dejaron las carreteras en un mal estado. «Cayeron muros de contención y se destrozaron vallas... Hay que reconstruirlo, así como limpiar la zona y reasfaltar», explicó el director insular de Carreteres.

«Por estas carreteras se puede circular sin problemas, aunque aún queda trabajo por hacer», agregó Aguiar.

Los problemas en las carreteras como consecuencia de las inundaciones no han acabado. El pasado fin de semana, las fuertes precipitaciones provocaron el desbordamiento de un torrente que inundó el Camí de Conies. La vía también quedó en pésimo estado sobre la que habrá que actuar. Cayeron muros de pedra en sec y la carretera quedo embarrada. De momento, se realizará una actuación urgente y más adelante se realizará una reforma más seria.

Efectos de la lluvia

En la entrada al municipio de Sant Llorenç, la carretera también ha sufrido los efectos de las fuertes lluvias. Los primeros trabajos consistieron en la limpieza y retirada de maleza de la vía que arrastró la lluvia.

Los arreglos de emergencia los están realizando las brigadas del propio organismo insular, dado que al estar en la recta final del año, el departamento de carreteras no dispone de presupuesto para emprender obras de envergadura.