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MARTA MEDRANO Hace unas semanas que se han iniciado las obras de construcción de un nuevo depósito regularizador de agua en la zona de sa Graduada. El equipo de gobierno actual ha recuperado esta obra planificada en la anterior legislatura y ha decidido ampliarla para que esta infraestructura pueda sustituir al depósito actual, con capacidad únicamente para 400 metros cúbicos y que es del todo insuficiente para abastecer sin problemas el crecimiento poblacional previsto.


La construcción del nuevo depósito cuenta con una subvención de la Conselleria de Medi Ambient de 300.000 euros y servirá para adaptar el sistema de almacenamiento de agua de sa Pobla a las exigencias de la Conselleria de Sanitat. En este sentido, el actual equipo de gobierno ha modificado algunos aspectos del proyecto inicial. Así, entre otras cosas, el nuevo depósito estará compartimentado para que se pueda utilizar sólo una parte en caso de averías. «Esta modificación nos permitirá no tener que parar el suministro de agua a todo el pueblo en caso de averías o de una limpieza de esta infraestructura», explicó el alcalde, Joan Comes (Ixsp).

Otro de los aspectos que también se han mejorado es su capacidad. Así, se ha pasado de los 800 metros cúbicos iniciales a una capacidad de entre 1.200 y 1.600 metros cúbicos de agua.