TW
0
MICHELS La consellera d´Agricultura i Pesca, Mercè Amer, se compromete a reforzar el laboratorio de investigaciones marinas y acuicultura del Port d´Andratx para facilitar el regreso de la cranca (centollo) y la corbina en las costas mallorquinas. Así, cincuenta años después de la desaparición de esta especie de crustáceos de Mallorca, la reintroducción de las mismas provendrá de Córcega, de donde el Govern traerá un centenar de ejemplares, cuatro veces más que el año pasado. En Balears, sólo ha sobrevivido cranques en Formentera. De la isla francesa se llevan al Port d´Andratx individuos ya fértiles que crían en las instalaciones del laboratorio. La bióloga Elena Pastor explicó que, por un lado, se destinan a cultivo y, por otro, se sueltan individuos marcados, a los que se realiza un seguimiento para conocer más sobre su comportamiento y sobre las posibilidades de recuperación.

Hasta el momento, se han hecho sueltas en la costa de Andratx y en Cabrera. Los próximos meses de marzo y abril, se liberarán individuos en el parque natural de Llevant. Según avanzó la consellera, también este año se introducirán corbinas en Alcúdia.

Otro de los problemas que plantea la cranca para su reintroducción es que se trata de una especie migratoria. Así, en invierno se traslada a aguas más profundas y vuelve a la superficie en verano para criar. De esta forma, de los veinticinco soltados el año pasado en la Cabrera se han recuperado ocho. Pastor indicó que aún son pocos ejemplares y que todavía es pronto para plantear una reintroducción a gran escala. La consellera, por su parte, incidió en la importancia que tendrá para la pesca en Mallorca poder recuperar estas especies.