TW
0
GUILLEM MAS Cuando ya se cumplen seis meses del inicio del curso escolar, la Conselleria d'Educació todavía no ha resuelto las numerosas deficiencias existentes en la obra nueva de ampliación del colegio Jaume Vidal y Alcover, y que ya fue denunciado por los padres, madres y profesorado del centro educativo hace unos meses. A día de hoy, el malestar y la indignación de todo el colectivo va en aumento.

La realidad es que en estos momentos la mayoría de baños nuevos del centro no evacúan correctamente y el resultado es que «los excrementos de nuestros hijos y hijas se acumulan, un hecho que comporta un alto riesgo de contagio para todos los niños».

Las pluviales del edificio todavía no están conectadas a ninguna parte y, por lo tanto, «la escuela nueva ya presenta graves problemas de humedades e inundaciones». Además, añaden que «el patio que tanto costó conseguir está infrautilizado, puesto que no cumple las condiciones mínimas de seguridad. Esta situación provoca que los niños y niñas no puedan jugar con ningún juego y se tengan que conformar con grava y más grava».

Los padres y madres del colegio Jaume Vidal y Alcover afirman estar «cansados de aguantar todas estas deficiencias y de ir de un lado a otro -del Ajuntament a la Conselleria y viceversa-, con el objetivo de aclarar quien las puede arreglar».

Así, piensan que «hay necesidades suficientemente graves como para que se abandonen las luchas políticas en beneficio de la educación de nuestros niños». Además, los padres aprovechan para exigir una nueva escuela y en condiciones.

El pleno celebrado ayer, con los votos a favor del equipo de gobierno PP-AIPC y la abstención de ALM-UM y PSM+Esquerra+Verds, la subsanación de deficiencias para hacer equipamiento escolar un solar de s'Hort d'en Roig con el objetivo de hacer una escuela.