Los propietarios del emblemático hotel Formentor han presentado un anteproyecto de obra en el Ajuntament de Pollença que prevé el derribo por fases de todas las edificaciones existentes para construir un nuevo edificio con 103 plazas hoteleras más de similar estética al original. Así lo confirmó ayer el alcalde de Pollença, Joan Cerdà, que a falta de los informes técnicos, explica que a priori la propuesta cumple la legalidad vigente por lo que será viable.
El anteproyecto de reforma mantiene la escalinata de acceso y los jardines y propone el derribo en diferentes fases del actual edificio para ser sustituido por uno nuevo de mayor capacidad que mantendrá una estética muy similar. El hotel Formentor, que actualmente tiene 247 plazas, pasará a tener 350 plazas turísticas, ajustándose a lo que prevé la nueva normativa urbanística de Pollença que todavía está en tramitación.
El anteproyecto prevé además la construcción de un spa y es que la intención de los propietarios es de que el hotel suba de categoría y pueda abrir todos los días del año. Según explica el alcalde Joan Cerdà, el derribo del actual hotel se ajusta a la normativa dado que no se trata de un edificio protegido.
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