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V. M. L. La reunión de la mesa negociadora entre los sindicatos municipales y el equipo de gobierno celebrada ayer terminó con la parte social levantándose de la mesa. Los doce representantes de los trabajadores municipales (cuatro por formación) abandonaron la sala molestos por la respuesta del Ajuntament y por el bajo nivel político de sus interlocutores. Ni el alcalde, Carlos Delgado; ni el teniente de alcalde delegado de Personal, Bartolomé Bonafé, ni el director de servicios generales, Joaquín Legaza, asistieron a su reunión, lo que es visto como un «menosprecio» por la parte sindical que lo consideran «inconcebible» por parte de representantes públicos. La delegación estuvo compuesta de la jefa de personal y un asesor, el ex concejal José Manuel Barquero.

En el encuentro, según fuentes informaron STEI-i, UGT y CC OO, ambos responsables municipales se limitaron a leer la respuesta del equipo de gobierno a sus reivindicaciones. En ella, el Ajuntament rechaza abonar el complemento específico de forma íntegra y posterga cualquier posibilidad de mejora salarial que compense la pérdida de poder adquisitivo de los funcionarios hasta dentro de dos o tres años, es decir, hasta el próximo año electoral.

Sobre todo, la segunda respuesta resulta inaceptable para los sindicatos del Ajuntament que, ante la imposibilidad llegar a acuerdos con sus dos interlocutores, ya que carecen de capacidad de decisión, decidieron abandonar la reunión.

Así las cosas, los trabajadores municipales volverán a la carga y se movilizarán de nuevo el próximo jueves, coincidiendo con el nuevo pleno municipal. Así, se repetirá la movilización de los dos últimos jueves y se volverán a reunir empleados de Calvià 2000, agentes de la policía municipal y los funcionarios del Ajuntament. La Policía Local ya se ha concentrado en cinco ocasiones.

Los responsables sindicales exigen para continuar con las negociaciones que se sienten en la mesa responsables políticos del Ajuntament con capacidad de decisión.