TW
0
J.SITGES El goteo de turistas y residentes que pasean por el conocido sendero de las Atzavares es incesante pese al calor que azota nuestras Islas. Y es que el camino que une la concurrida playa de Son Moll con Cala n'Aguait sirve al objetivo por el que nació: dar un nuevo impulso al turismo de Capdepera. Ahora, la Conselleria de Medi Ambient ultima los proyectos de otros cuatro paseos similares que basan su trazado en éste.

Las obras, que comenzaron en febrero del 2007, consistieron en habilitar lo que era un simple sendero sin que éste perdiera su carácter. Las intervenciones se centraron en la adecuación de los viales y las zonas públicas colindantes. Como acabados, nada más simple que la instalación de un drenaje de aguas pluviales, iluminación y jardines con plantas autóctonas como romero, ullastres o tamarindos.

El conseller de Medi Ambient, Miquel Àngel Grimalt, destacó durante una visita a Cala Rajada que «con este tipo de paseos queremos acercar nuestra costa a los visitantes y a los residentes para que puedan disfrutarla tanto como los que la conocen de toda la vida».

Por otra parte, cabe recordar que Grimalt, durante el acto de inauguración del paseo de las Atzavares, anunció que después del verano comenzarán las obras de construcción de un paseo peatonal paralelo al torrente de Canyamel.

Asimismo, los futuros paseos de Can Picafort, Portocolom y s'Illot, que estaban paralizados pendientes de consenso entre vecinos y administración o a la espera de otros trámites ya tienen, en el paseo de las Atzavares, un espejo donde mirarse.