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M. BONNÍN El polígono industrial de Manacor se ha convertido durante este fin de semana en un escaparate de vehículos en venta en la que es la cuarta edición de la Fira de Vehicles d'Ocasió i de Maquinària Agrícola, que se inauguró ayer y también tiene las puertas abiertas hoy.

Más de 500 coches de 20 concesionarios diferentes se exponen a los mejores precios. Ésta es una iniciativa que en la presente edición sirve de herramienta para aliviar la crisis del sector automovilístico, que ha visto cómo sus ventas descendían alrededor de un 30 por ciento.

Los precios de la mayoría de automóviles usados y de kilómetro cero expuestos en el polígono oscilan entre los 2.000 y 11.000 euros. «Estamos haciendo un esfuerzo para poner precios adaptados a la situación de crisis», explicó ayer Domingo Martí, presidente de la Asociación de Industriales del Metal de la Comarca de Manacor, organizadora del evento.

Entre la multitud de vehículos se encuentra también una auto caravana y algunos tractores. Como novedad de este año, se ha instalado un circuito de karts. Además, el tren turístico gratuito que tenía que recorrer las calles de la localidad para los visitantes de la feria ha sido sustituido en el último momento por un autobús rotulado, a causa de la amenaza de lluvia.