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MARGA JOY
Xisco Mulet (UM) recogió ayer al mediodía la vara de la Alcaldía de Valldemossa de manos del que ha sido el alcalde hasta esta semana, Jaume Vila, de la agrupación local La Valldemossa que Volem. Mulet será el alcalde durante un año, hasta que recoja el testigo Nadal Torres, de Grup Independent de Valldemossa, que se convertirá en el edil durante los últimos doce meses de la legislatura.

Este es el resultado del pacto firmado entre estas tres agrupaciones después de las elecciones municipales de 2007, que dieron lugar a muchos pactos de gobierno en los ayuntamientos de las islas, por lo que durante este mes de junio serán muchos los alcaldes que pasarán el testigo a otros miembros de su equipo de gobierno, siendo Valldemossa el primer pueblo en llevar a cabo este cambio.

En el pleno extraordinario al que acudió el conseller de turismo Miquel Nadal, Xisco Mulet fue proclamado alcalde con cinco votos a favor, los del actual equipo de gobierno, y dos en contra, los de la oposición del PP, que pidió disculpas por la ausencia de dos de sus concejales, Paco Boscana y Noui Estaràs, que no pudieron acudir al pleno por motivos laborales y personales.

Todos lo allí presentes, incluyendo la oposición, destacaron la buena gestión del hasta ahora alcalde, Jaume Vila, de los pocos alcaldes de la isla que no han tenido dedicación exclusiva. Celio Bauçà, del PP, afirmó que «nadie puede discutir que se ha volcado en el Ajuntament».

Por su parte, Xisco Mulet, que sí tendrá dedicación exclusiva, admitió que «el listón está muy alto», aunque aseguró recoger el testigo «con muchas ganas y con intención de intentar superar a su antecesor».

El pacto de Valldemossa ha destacado hasta ahora por su buen funcionamiento y entendimiento entre las tres partes, algo que los presenten pretenden que siga siendo así.