Payeras apuntó a la empresa de la que es socia la regidora de Serveis Socials, Catalina Fornés, como la responsable de contaminar el suelo urbano. Payeras señaló que «se han vertido más de cien camiones de escombros entre los que se encuentran materiales peligrosos como botes de pintura, uralita, plásticos y mangueras» por lo que pidió al equipo de gobierno «que se inicien las diligencias oportunas para parar el vertido incontrolado en la zona».
El alcalde Martí Fornés aseguró que «todo lo que se pueda llevar a cabo de la manera más legal por parte del Ajuntament se hará» aunque reconoció que «no podemos hacer una persecución a esta empresa».
El regidor de Medi Ambient, Nadal Muñoz, explicó por su parte que «se ha abierto un expediente de infracción urbanística por tirar escombros sin tener licencia de acopio de materiales y desde el punto de vista medio ambiental también se han iniciado los trámites».
Además, Muñoz aseguró que «el Ajuntament ha cerrado la finca para evitar nuevos vertidos» y descartó la empresa de Fornés «como responsable del vertedero ilegal porque sólo han vertido materiales limpios que no contaminan».
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