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El Ajuntament d'Inca quiere que la fiesta del Dijous Bo empiece el sábado anterior, la vigilia de la festividad de Santa Maria la Major. «Pretendemos que los inquers comiencen a respirar fiesta el domingo», explicó el teniente de alcalde, Felip Jerez.


Con tal propósito, el equipo de gobierno ha decidido trasladar el correfoc del Dimecres Bo al sábado inmediatamente anterior. Saldrá de la plaza Llibertat y se dirigirá hacia la zona de locales de ocio nocturno. Los propietarios de los locales, por su parte, decorarán específicamente las calles con el fin de promocionar la fiesta. Ajuntament y restauradores coincidieron en bautizar este día como el Dissabte Gran.


Asimismo, ayer se presentó la imagen del Dijous Bo de este año. «Queremos que vengan más de 200.000 personas, como el año pasado», dijo el alcalde, Rafel Torres.