El Consell de Mallorca acepta cambiar la normativa y salva los pisos del Fantasio de la demolición

A instancias del Ajuntament d'Alaró, el Consell da ahora cobertura legal a este inmueble y se da por finalizado un litigio que comenzó en 2006, cuando un particular denunció que unos cuarenta centímetros de la fachada del edificio, un total de 11 metros cuadrados, entraban en zona pública de la calle. La justicia decretó que el Ajuntament el constructor tenían que hacerse cargo de las indemnizaciones a los propietarios y el Consistorio tuvo que habilitar una aval de 3,5 millones.

Trabajo

El proceso judicial se fue alargando hasta que en 2021 se decretó una orden de ejecución de sentencia y de derribo del edificio, aunque también se abría la puerta a una modificación urbanística para salvar el inmueble. El Ajuntament se puso a trabajar hasta lograr la aprobación del Consell a este cambio. El siguiente paso consistirá en legalizar los inmuebles con el final de obra. El alcalde de Alaró, Llorenç Perelló, resalta que «con esta medida damos una salida a las familias que vivían con una permanente espada de Damocles y ahora podrán conservar sus casas. Hemos trabajado mucho esta legislatura y hay que agradecer la colaboración del Consell».