Para su lanzamiento a nivel mundial Mercedes-Benz ofrecerá cuatro versiones denominadas SLC 180, SLC 200, SLC 300 y el AMG SLC 43. Las tres primeras montarán un propulsor de cuatro cilindros con tres niveles de potencia (156 CV, 184 CV y 245 CV) y una versión AMG que contará con un motor de 6 cilindros en V y 390 CV.
El SLC 200 y SLC 300 estarán disponibles en dos variantes de diseño exterior (negro estándar, negro obsidiana o gris selenita con parachoques AMG y elementos de adorno con sección inferior en cromo plateado o pintura amarillo Sol, blanco polar o blanco diamante bright con los elementos mencionados ejecutados en negro en su parte inferior). De forma análoga, las manillas de las puertas, los retrovisores y el embellecedor trasero se ejecutan en color negro de alto brillo, en contraste con el tono claro de la carrocería. Un punto en común entre todos los modelos es la placa exclusiva SLC Final Edition que adorna los guardabarros delanteros, por debajo de la aleta cromada. Otro foco de atención son las llantas de aleación AMG de serie de 18” en diseño de 5 radios y pintadas en color negro de alto brillo.
En cuanto al habitáculo, llama la atención la combinación cromática formada por la napa bicolor negro/plata pearl con costuras de adorno en gris alpaca. A destacar además el volante deportivo, los reposacabezas y la palanca selectora del cambio automático con el logotipo SLC plateado. El volante deportivo multifunción incluido de serie combina cuero de efecto carbono en el segmento superior y en el segmento inferior con napa lisa en la zona de apoyo de las manos.
En el equipamiento están disponibles las alfombrillas negras con logotipo, calefacción en los reposacabezas AIRSCARF, calefacción de asiento y paquete de memorias para los asientos, la columna de la dirección y los retrovisores exteriores y un apoyo lumbar con 4 vías de ajuste para el conductor y el acompañante.
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