Un experimento hecho por investigadores de la Universidad de
Groningen abre la vía a un cambio en la percepción de la anatomía
genital humana y nuevas perspectivas para el tratamiento de la
fertilidad.
El estudio, que ayer publicaba la revista especializada British
Medical Journal, ha permitido apreciar que el pene adquiere la
forma de un bumerán cuando la pareja mantiene relaciones sexuales
en la postura del «misionero». Este descubrimiento termina con la
creencia de que el pene adquiere la forma de una «s» o se mantiene
derecho durante las relaciones sexuales, según los
investigadores.
El sexólogo Willibrord Weijmar Schultz, jefe del proyecto,
aseguró que el descubrimiento es de «vital importancia para
estudios sobre fertilidad».
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