Las autoridades ecuatorianas anunciaron ayer acciones legales
contra los responsables del derrame de unos 605.000 litros de
combustible de un buque en las islas Galápagos, donde prosiguen las
labores para evitar mayores daños ecológicos. El ministro del
Ambiente, Rodolfo Rendón, aseguró ayer que pedirá a la Fiscalía una
«investigación profunda» para sancionar a los culpables del derrame
de combustible del buque «Jessica» y evitar que el hecho se repita.
Rendón indicó que presentará una denuncia ante el Tribunal Superior
de Guayaquil y pedirá a la Contraloría del Estado que efectúe una
auditoría ambiental.
Unos 57.000 litros de combustible aún no han sido sacados del
buque de bandera ecuatoriana, que encalló el pasado miércoles cerca
de la isla San Cristóbal. El secretario general de la Fundación
científica «Charles Darwin», Fernando Espinoza, aseguró ayer que
«hasta el momento hay unos 3.000 kilómetros cuadrados de superficie
en los que se pueden encontrar manchas de hidrocarburos», con
diámetros de entre 100 y 150 metros. Espinoza considera positivo
que no se haya formado una sola mancha gigantesca y que el diesel
se está evaporando. Rendón, que llegó a afirmar que el derrame
produjo un «gravísimo impacto ambiental», y Espinoza, minimizan
ahora la situación.
Por otra parte la Unión Europea (UE) anunció ayer el envío de un
grupo de expertos a las islas Galápagos para ayudar a controlar la
mancha de 600 toneladas de combustible que escapó del buque
«Jessica» cerca de las islas Galápagos. Estos expertos «darán apoyo
técnico al gobierno de Ecuador», afirmó el gobernador del
archipiélago, Fabián Parra.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.