La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y el Colectivo de
Víctimas del Terrorismo (Covite) pidieron ayer al Papa en un frío
recibimiento por parte del Vaticano que «ampare a las víctimas» de
ETA, «que condene el nacionalismo excluyente y que interceda ante
la Iglesia española para que cese la ambigüedad de la iglesia
vasca».
Representantes de las víctimas del terrorismo denunciaron, en
los escasos dos minutos en los que fueron recibidos por el
Vaticano, que existe una organización de curas vascos que apoya a
ETA y que en los numerosos manifiestos que la iglesia vasca ha
hecho públicos contra el terrorismo, unos 40, nunca ha incluido en
los mismos la palabra ETA.
Destacaron que muchos prelados españoles, como el cardenal de
Madrid, Antonio Rouco Varela, o los arzobispos de Sevilla, Carlos
Amigo Vallejo, y Valencia, Agustín García-Gasco, han condenado sin
paliativos al terrorismo y sus mensajes han sido claros, pero que
los obispos en general no presionan a la iglesia vasca. «Sentimos
que la iglesia vasca está más cerca de los terroristas que de las
víctimas. Las reacciones más contundentes contra ETA se han
producido en Roma (Vaticano) y no en España», subrayó Vicki
Uriarte.
Un representante de AVT, Juan Antonio Corredor, y dos de Covite,
Vicki Uriarte y María del Mar Negro, fueron recibidos por el Papa
al término de la audiencia general de los miércoles (el habitual
besamanos), celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano.
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