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EFE"MADRID
Los políticos aprovecharán la época estival para disfrutar de sus familias y dedicarse a sus aficiones, y en muy pocos casos usarán sus vacaciones para viajar al extranjero, decantándose en su mayoría por el turismo nacional. La lectura, el deporte, los paseos y excursiones y en menor medida la cocina, son las aficiones preferidas de nuestros políticos, quienes en su mayor parte veranearán durante el mes de agosto, al reiniciarse el curso político a primeros de septiembre.

Los miembros del Gobierno no podrán iniciar sus vacaciones veraniegas hasta el viernes 3 de agosto, fecha en la que se celebra el último Consejo de Ministros. El presidente del Gobierno, José María Aznar, cambiará, por primera vez en diez años, su lugar habitual de veraneo en el municipio castellonense de Oropesa por la isla de Menorca. Entre los miembros del Gobierno destaca su preferencia por el Norte para disfrutar de su periodo de descanso, especialmente Galicia; este es el caso del ministro-portavoz, Pío Cabanillas, y del titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio.

También el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Mariano Rajoy, hará algunas «escapadas» a Galicia, a su Pontevedra natal, aunque pasará la mayor parte del mes de agosto en su despacho del Palacio de La Moncloa en Madrid. El jefe de la diplomacia española, Josép Piqué, descansará en la montaña de Cataluña, y procurará «que el desplazamiento más largo sea hasta el supermercado».