En la foto, un grupo de ecuatorianos espera el regreso a su país.

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EFE"MADRID
El grupo de 85 ecuatorianos que llegó el pasado viernes al aeropuerto de Barajas en un vuelo procedente de Santo Domingo (República Dominicana) ha sido retornado ya hacia su país, después de que las autoridades españolas decretaran la no admisión de estos ciudadanos por irregularidades en sus documentos. Los 61 ecuatorianos que todavía permanecían ayer por la mañana en la sala de inadmitidos del Cuerpo Nacional de Policía en el aeropuerto de Barajas fueron embarcados en un vuelo de la compañía venezolana Avensa con destino a Caracas que despegó a las 15.30 horas, y desde allí viajaron en otro avión hasta la capital de Ecuador (Quito).

Los billetes aéreos en Avensa han sido gestionados y abonados por la compañía con la que viajaron a Madrid, Air Europa, al igual que los pasajes de los otros 24 ecuatorianos del mismo grupo que partieron anteayer hacia su país. El viernes llegaron al aeropuerto madrileño más de 90 ecuatorianos en el vuelo diario de Air Europa procedente de Santo Domingo, de los que 85 fueron considerados «inadmitidos» por la Policía al no poder acreditar justificadamente el objeto y las condiciones de su estancia como turistas en España, tal como establece la Ley de Extranjería.

Además, el ministro de Interior, Mariano Rajoy, declaró que en la escala del vuelo en Santo Domingo «avisamos tanto a la compañía como a esas personas de que no podrían entrar ilegalmente en España», y afirmó que «venían manipulados y engañados por unas mafias». La Asociación Hispano Ecuatoriana Rumiñahui, que acompañó desde el viernes hasta ayer a los familiares de los ecuatorianos inadmitidos que esperaban en Barajas noticias sobre sus parientes, ha solicitado ante el juzgado de guardia dos procedimientos de «habeas corpus», el primero de ellos rechazado por el juez por defectos en la forma de presentación, y el segundo, pendiente aún de resolución.

«Nos han comunicado del juzgado que hasta el lunes no recibiremos respuesta del habeas corpus», denunció la presidenta de la Asociación, Dora Aguirre.
Por otro lado, un grupo de veinte inmigrantes irregulares tuvo que alcanzar a nado la isla de Fuerteventura, tras ser arrojados al agua desde la patera en la que viajaban por los patrones de la embarcación. Los inmigrantes, dieciséis varones y una mujer de origen subsahariano y tres hombres marroquíes, trataban de alcanzar la costa sur de Fuerteventura hacia las 14.00 horas del sábado cuando, según aseguraron, fueron tirados al mar por dos patrones.