El Príncipe de Asturias recibió ayer con motivo del Centenario del
Atlético de Madrid a directivos, jugadores y empleados del club en
un acto en el Palacio de La Zarzuela en el que fue obsequiado con
una camiseta del equipo con el nombre de Letizia en el dorso.
Jesús Gil, máximo accionista del club, entregó también al
Príncipe Felipe una reproducción artística en bronce del estadio
Vicente Calderón y, entre el regocijo de todos los asistentes, unos
patucos y un gorrito de bebé con los colores rojiblancos.
Gil, en una palabras que pronunció ante Don Felipe, dio por
hecho la simpatía del heredero de la Corona por el club, aunque
precisó que «en la entidad le exoneramos de que no pueda
pronunciarse» sobre este asunto, ya que «esta Casa está por encima
de todo».
En este sentido, Gil señaló que nadie les podrá quitar aquella
imagen de niño, en referencia a cuando el Príncipe de pequeño
afirmó ser seguidor atlético.
El ex presidente del club madrileño añadió: «De verdad, de
verdad, de verdad, casi de nacimiento todos los atléticos somos
monárquicos por encima de todo». No se imagina lo que representa
para muchas familias atléticas. Cuando un atlético se pasea por
España y por el mundo recibe muchas felicitaciones por contar con
el Príncipe entre sus simpatizantes», agregó Jesús Gil. Cuando Gil
le entregó a Don Felipe la camiseta, los patucos y el gorrito le
comentó «no pasa nada», en un deseo de quitarle importancia al
saltarse el protocolo por la originalidad del regalo, al tiempo que
deseó que el futuro sea del «Atleti».
El Príncipe, por su parte, agradeció el «honor» que supone para
él ser presidente de los actos del Centenario y expresó su
«felicitación y afecto profundo a la familia rojiblanca.
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