Aunque hasta la madrugada de hoy no habrá sido posible hacer
balance de la afluencia de jóvenes a los botellones convocados ayer
en más de 20 ciudades españolas, parece claro que la lluvia habrá
dado la clave del «éxito» o el «fracaso» de la cita. Las
autoridades encararon estos acontecimientos preparadas para, en
función de las normativas locales, poner orden ante posibles
altercados o requisar las bebidas y disolver las
concentraciones.
Según cifras de la Policía Local de Granada, a las ocho de la
tarde se daban cita en la explanada de la Huerta del Rasillo -donde
se festejaba la Fiesta de la Primavera- entre 20.000 y 30.000
personas. En Zaragoza, a las ocho había en torno a 3.000 personas
concentradas frente al Centro Politécnico Superior de la
Universidad para celebrar el día de «San Pepe» sin que se
registraran incidentes. En todos los casos la presencia policial
fue notable, con instrucciones diferentes en función de la
normativa de la ciudad.
A última hora de la noche, en Valladolid eran unos 500 los
participantes en el 'botellón', mientras en Jaén apenas llegaban al
centenar los reunidos.
Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona activaron
a las 21 horas el dispositivo policial para evitar el
'macrobotellón' convocado en la Rambla del Raval. Alrededor de 350
agentes vigilan la zona para intentar que el acto, en el que
compiten varias ciudades españolas, fracase.
En Madrid, donde está prohibido beber en la calle, el
Ayuntamiento había anunciado que en ningún caso iba a permitir la
celebración de este tipo de eventos convocados en la Plaza del Dos
de Mayo y en el Faro de Moncloa. Hasta allí se desplazaron un total
de 300 efectivos policiales que, aunque se encontraron con un
panorama de absoluta tranquilidad en las primeras horas de la
tarde, a partir de las ocho comenzaron a requisar botellas. La
fuerte presencia policial disuadió a los jóvenes que se iban
acercando, aunque inmediatamente se fue montando una convocatoria
paralela, en el Campo de las Naciones.
La Fundación Alcohol y Sociedad manifestó ayer «preocupación»
por el 'botellón' porque puede generar «conductas de riesgo» que
involucren a menores, así como de jóvenes que cojan el coche
después de beber o «situaciones de abuso» en el consumo. El
director general de la entidad Jaime Gil Robles, explicó que la
magnitud que ha tomado el 'botellón' de ayer en varias ciudades de
España se debe a que «los medios de comunicación han dado mucho
volumen» a lo que debería ser una actitud de responsabilidad por
parte de los jóvenes en cuanto a su ocio.
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