Protesta contra el aborto realizada ayer en la clínica madrleña El Bosque. Foto: EFE

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Las cinco clínicas que realizan interrupciones voluntarias del embarazo en Madrid (dos han sido cerradas cautelarmente por el Gobierno regional) cerraron ayer sus puertas para evitar incidentes durante las concentraciones ante sus puertas realizadas por asociaciones provida para pedir la derogación de la ley del aborto y el establecimiento de medidas de apoyo a la mujer.

La vocal de Madrid de la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción Voluntaria del Embarazo (ACAI), Empar Pineda, responsable de la clínica Isadora, explicó a Europa Press que estos centros decidieron cerrar sus puertas, «a pesar de que la Delegación del Gobierno garantiza la protección policial para las cinco clínicas, para evitar a las mujeres que acudieran ayer el mal trago de enfrentarse a los improperios de las personas concentradas en el exterior».

No obstante, Pineda señaló que no se produjeron incidentes a las puertas de los centros, donde se concentraron «un pequeño grupo de personas con sábanas blanca y velas».

Unas 150 personas se concentraron convocadas por Alternativa Española (AES), frente a las cinco clínicas madrileñas con licencia para practicar abortos para pedir la derogación de los supuestos legales en los que se puede abortar y el fin de las subvenciones que la Comunidad otorga a estos centros.

Los concentrados reivindicaron además el cierre de todas las clínicas donde se practican abortos y la transformación de los Centros de Planificación y Orientación familiar en «agentes activos por la Vida».

La asistencia ha sido menor de la prevista por este partido político de orientación católica, ya que, según Jose María Carrera, portavoz de la organización, esperaban «cientos» de concentrados frente a la clínica Dator, adonde han acudido finalmente unos cuarenta manifestantes. Las concentraciones, a las que han acudieron familias con niños y bastantes personas mayores que portaban pancartas donde se leía «No al aborto. Sí a la vida», transcurrió sin incidentes a pesar de que las clínicas decidieron cerrar por temor a posibles altercados.