Imagen del desembarco de los inmigrantes en Porto Empedocle, Sicilia. Foto: EFE

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EFE-ROMA

Los 94 inmigrantes que todavía no habían llegado a las costas italianas y que permanecían desde hace cinco días a bordo de la nave mercantil «Pinar» desembarcaron ayer en Porto Empedocle, en Sicilia. Entre los recién llegados a Sicilia se cuentan 34 mujeres y 60 hombres, todos ellos en buen estado de salud, según las mismas fuentes.

En la mañana de ayer ya habían desembarcado treinta inmigrantes procedentes del «Pinar» en Porto Empedocle, y otros veinte habían arribado a la isla italiana de Lampedusa después de haber sido trasladados durante la pasada noche a dos naves de la Marina militar italiana.

De entre los 145 inmigrantes socorridos por el «Pinar», una joven embarazada falleció el pasado jueves.

Según los medios locales, la fiscalía de Agrigento, en la isla de Sicilia, ha abierto una investigación para descubrir las causas de su muerte. El «Pinar», de bandera panameña y propiedad de un armador turco, se dirigía a Túnez cuando el pasado jueves socorrió a los inmigrantes que viajaban en dos barcazas que estaban al sur de la isla italiana de Lampedusa.

Desde entonces los gobiernos de Malta e Italia han mantenido una fuerte disputa para ver qué país tenía la responsabilidad de acoger a los inmigrantes.

Según las autoridades maltesas éstos debían dirigirse a Lampedusa por ser la isla más cercana a la embarcación, mientras que las autoridades italianas argumentaban que el rescate había tenido lugar en aguas de jurisdicción de Malta.

Finalmente, la pasada noche los ministros de Interior y Asuntos Exteriores italianos, Roberto Maroni y Franco Frattini, aceptaron que los 145 indocumentados desembarcaran en Italia, después de que dos doctores que se habían trasladado al carguero advirtieran de que la situación era «insostenible».

Ambos subrayaron que su decisión no debe entenderse «ni como un precedente, ni como la aceptación de las razones argumentadas por Malta».

Un inmigrante de origen subsahariano fue ingresado ayer en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) del Hospital Comarcal y otros dos atendidos en el Servicio de Urgencias después de intentar llegar a nado desde Marruecos a Melilla por la zona de Aguadú, según informarons fuentes policiales y sanitarias. Los 'sin papeles', tres jóvenes del Africa subsahariana, fueron rescatados por un equipo del Grupo de Especialistas de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil y trasladados hasta tierra, donde fueron atendidos por el 061 y evacuados al hospital en ambulancia.

Los hechos ocurrieron pasadas las siete de la mañana del domingo aprovechando los inmigrantes que soplaba viento de poniente y el mar estaba tranquilo, aunque el agua estaba a una temperatura muy baja.