El tardeo cumple cuatro años.

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A pesar de su corta historia, tan sólo cuatro años, la moda del tardeo se ha consolidado, quitándose la etiqueta de una iniciativa pasajera más. La primera sala de fiestas que trajo esta fiesta de la Península, y que tiene registrado el nombre de tardeo, fue Kaelum. Todo el equipo de Ángel Oliveros trabajó para ofrecer este servicio a gente mayor de 30 años que salía a comer los sábados por la tarde y luego se quería tomar unas copas y, por qué no, bailar aunque todavía fuera de día.

Así pues, con el sol por testigo muchos fueron los parroquianos que comenzaron a peregrinar por los locales de copas de los alrededores de la barriada de Santa Catalina, debido a las interminables colas que se formaban en Kaelum, templo de la movida. Un beneficio colateral al que cada vez se han sumado más locales. Incluso en las últimas semanas, los empresarios de la noche del Passeig Marítim ofertan su particular petardeo.
Lo que hace cuatro años fue destino de muchos palmesanos los sábados por la tarde, en la actualidad grupos de amigos de pueblos de toda Mallorca bajan al tardeo. El próximo sábado, día 23, Ángel Oliveros y todo su equipo de Kaelum celebrarán el cuarto aniversario de Tardeo Palma. Para la ocasión, además de soplar las velas, estará pinchando Say-Yes Dj.

El pasado sábado, el buen clima animó a muchos a disfrutar de la marcha por el barrio palmesano. Ya no hay peleas, enfrentamientos o denuncias de vecinos, sino que la gente disfruta al más puro estilo carpe diem.

La Sala Luna es otro de los lugares imprescindibles un sábado tarde para quienes quieren escuchar música, tomar buenas copas, pasarlo bien con los amigos y, ¿por qué no? ligar. Las largas colas para entrar reflejan que lo de dentro tiene que estar bien. Locales como La Havanna, Cuba, The Soho, Tremenda y Lab, entre otros, también ofrecen ese buen y acogedor ambiente.