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La tradición dice que en Semana Santa los padrinos regalan a sus ahijados una mona de Pascua. Una celebración que este año se verá alterada debido al confinamiento, pero en la que muchos pasteleros no han bajado la guardia y afrontan el momento ofreciendo servicio a domicilio y reserva de monas personalizadas.

Desde hace 15 años, Pep Trías y su mujer, María del Mar Vich, abrieron Forn i Pastisseria Trías en el Secar de la Real. «Es una Semana Santa en la que hemos bajado la producción, por las circunstancias, pero no el peor año. Apostamos por el producto hecho en nuestro obrador y la materia prima de calidad. Y eso lo reconocen los clientes», comenta Pep, quien este año ha creado, en diferentes chocolates –negro, blanco y con leche– desde los huevos clásicos a casitas, spidermans y zapatos de tacón, para señoras. «Le hemos puesto mayor colorido a las Monas de este año».

ES FORN DEL PLA DE NA TESA.


Por su parte, Jaume y Matías Miralles, del Forn des Pla de na Tesa, han derrochado originalidad. «Hemos hecho una sartén con las populares ‘pilotes', del youtuber mallorquín Miquel Montoro, además del juguete sexual más famoso, el satisfyer», comentan. Una gran demanda de estas dos creaciones, para niños y adultos, además de la mona La Tapelta, del popular cuento infantil. Precisamente Jaume y Matías dedicarán desde hoy hasta el sábado, previa reserva, a repartir las Monas de Pascua a domicilio.

En el Forn Ca na Teresa, fundado en 1966, cuentan con una exquisita variedad y con una elaboración de lo más artesanal. Monas de Pascua que han deleitado a varias generaciones durante la Semana Santa. Desde niños a mayores reservan sus dulces típicos para compartir y regalar. Este año, más dulces y exquisitos que nunca.

En definitiva, ni grandes ni pequeños se quedarán estas fiestas de Pascua sin los deseados dulces de chocolate.