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J.JIMENEZ Manuel Moreno Muñoz, vecino de sa Penya y de 28 años de edad, es el culpable de la muerte de Llúcia Ferragut, acaecida horas después de que en la mañana del pasado 16 de diciembre fuera atacada cuando abría su tienda de la Marina. El jurado, reunido en Mallorca para juzgar al hombre que fue detenido, horas después del crimen, determinó al mediodía de ayer su culpabilidad.

Al fallo, sin embargo, no se llegó por unanimidad. El veredicto se obtuvo después de que siete de los nueve miembros del jurado descartaran su inocencia. El jurado, por contra, estuvo completamente de acuerdo en que Moreno Muñoz actuó influido por su grave dependencia a las drogas.

Este hecho, unida a la circunstancia de que el veredicto no ha precisado si el crimen fue un asesinato o un homicidio, obligó a que las partes personadas como acusación -fiscalía y abogado de la familia de la víctima- tuviera que reducir sus pretensiones y rebaja la pena solicitada para el acusado en 17 años de cárcel, 15 por un presunto asesinato y dos por robo. Ambas partes al principio de la causa habían solicitado 23 y 25 años de prisión para Moreno Muñoz de acuerdo a claras calificaciones de asesinato y robo. La defensa, por su parte y tras conocer el veredicto, solicitó sólo una pena de tres años de cárcel por homicidio a los que habría que sumar otros nueve meses por el robo.

Ahora todo depende del tiempo que tarde la magistrada Margarita Beltrán en dictar la sentencia del caso, fijada en un principio para el plazo de una semana. Este texto recogerá las conclusiones del jurado, así como la valoración judicial del crimen y la pena que tendrá que cumplir el toxicómano de sa Penya que fue sorprendido en plena calle por la policía con las joyas de la víctima y sus ropas manchadas de sangre, identificada como la de Llúcia Ferragut gracias al ADN.

Las deliberaciones del jurado para este caso se han prolongado por espacio de más de diez horas y no han estado exentas de contrariedades.