El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de tres años de
prisión para José Almagro, el hombre que fue acusado de intentar
atropellar a su mujer en los juzgados de General Riera. El acusado
ha sido absuelto de un delito de parricidio frustrado, pero se le
condenó por un delito contra la seguridad del tráfico, con la
agravante de desprecio a la vida de los demás.
Los hechos ocurrieron en el mes de diciembre de 1995. Almagro
había sido citado en el juzgado para tramitar la separación con su
esposa. El acusado vivía con otra mujer, pero no quería separarse
de su esposa. El hombre no quiso entrar en el despacho del juez.
Salió del juzgado, se subió a su moto, se colocó el casco y
arrancó. La mujer, representada por el abogado Tomeu Oliver,
mantuvo que su ex marido intentó atropellarla con la moto, pero
pudo evitarlo al ser apartada por un amigo suyo. Almagro, sin
embargo, mantuvo una versión diferente, y aseguró que su intención
no era atropellar a su ex mujer, sino suicidarse, y lo hizo
estrellándose contra el muro del juzgado. El tribunal de Palma que
juzgó los hechos estableció que el acusado se encontraba
trastornado. No se demostró que la intención de Almagro era matar a
la mujer.
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