Antonio Garijo, un jardinero de 64 años, fue hospitalizado ayer
tarde con heridas de pronóstico reservado tras ser atacado por dos
perros de la raza dogo de Burdeos en una casa del Port d'Andratx.
Los hechos ocurrieron minutos antes de las dos de la tarde,
cuando la víctima entró en el chalet del número 9 de la calle Aldea
Blanca, en donde trabaja como jardinero. Los dos canes, llamados
«Otelo» y «Odín», ambos de 16 meses de edad, se abalanzaron sobre
él y comenzaron a morderle por todo el cuerpo.
Otro jardinero que se encontraba en las inmediaciones escuchó
los gritos de auxilio del trabajador y corrió en su ayuda. En un
primer momento no pudo separar a Antonio Garijo de los animales,
pero al final les arrojó una manta y consiguió que lo soltaran.
Los dos jardineros, de esta manera, consiguieron salir del
chalet y pidieron ayuda. La víctima se encontraba ensangrentada y
muy asustada. Al principio no quiso contar lo que había pasado, e
incluso insinuó que se había caído, pero al final relató a la
Guardia Civil y a la Policía Local que había sido atacado por los
dos dogos de Burdeos. Dos ambulancias llegaron a la calle Aldea
Blanca y atendieron a Antonio Garijo, que presentaba desgarros y
heridas incisas en las piernas, manos y espalda.
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