La Policía Nacional buscó la navaja con la que fue apuñalada la mujer.

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La Policía Local ha detenido a un vecino de Palma que apuñaló por dos veces a su esposa en una pierna y que luego la arrastró por la calle más de cien metros, tapándole la boca e ignorando que ella se desangraba.

Tal y como informó ayer este periódico, pasadas las nueve de la noche los vecinos de una finca de la calle Pasaje Can Curt, en la zona de Pere Garau, se pusieron en contacto con la Policía Local para alertar de una riña familiar. Uno de los comunicantes explicó que había escuchado gritos de auxilio y que al asomarse a la calle observó cómo la víctima, Lucía M.C. de 35 años y de nacionalidad ecuatoriana, era arrastrada a la fuerza por su esposo, en dirección a la calle Manacor.

La mujer sangraba de forma abundante e iba dejando un reguero a lo largo de la calle. Varias dotaciones del 092 acudieron con prontitud a aquella barriada y en las inmediaciones de la Plaza de las Columnas detectaron a la pareja. La mujer, gravemente herida, vio a la policía y aprovechó el desconcierto de su esposo para escapar, en estado de gran nerviosismo. Cuando llegó hasta los agentes había perdido mucha sangre y explicó, de forma atropellada, que su marido la había apuñalado dos veces en la pierna izquierda.

El hombre portaba una navaja en una de sus manos y los funcionarios adoptaron las medidas necesarias porque no sabían cómo iba a reaccionar al sentirse acorralado. El individuo, sin embargo, no se resistió y fue introducido en un coche patrulla en calidad de detenido. En el momento del arresto no portaba documentación alguna, por lo que fue trasladado a San Fernando mientras otros agentes permanecían junto a la herida, a la espera de la llegada de una ambulancia.