TW
0
J.J.-P.M. Los bomberos de Palma y del CIM, así como policías locales de Palma y distintas localidades de la Isla, y la Guardia Civil, coordinados por el 112, efectuaron más de 200 salidas entre la noche del pasado lunes y el día de ayer. Los servicios estaban relacionados con problemas a causa de las fuertes rachas de viento que llegaron a alcanzar de máxima los 117 kilómetros por hora.

La fuerza del viento provocó caídas de muros, árboles, uralitas, luces navideñas, roturas de toldos, cristales y andamios. En ningún caso se produjeron daños a personas. También a causa del viento cinco localidades de la isla vieron interrumpido el suministro eléctrico.

Los bomberos del CIM efectuaron ayer alrededor de 150 servicios, sobre todo en Calvià, Alcúdia, Llucmajor, Sa Pobla, Sóller, Son Servera, Sencelles y Bunyola. En Palma se llevaron a cabo más de un centenar de servicios, sin que tampoco se produjeran lesiones a personas. Acudieron efectivos del Cos de Bombers y de la Policía Local.