El Grupo de Delincuencia Económica del Cuerpo Nacional de Policía
citará a declarar en breve a los trabajadores denunciados por la
empresa de autocares Catalina Marqués para aclarar si tienen alguna
relación con el incendio que destruyó por completo dos vehículos de
la empresa y afectó a parte de la nave del polígono de Son
Castelló.
Tal y como informamos en la edición de ayer, el fuego se declaró
el domingo día 31 por la noche, en las instalaciones de la calle
Gremi Porgadors número 12, entre Son Castelló y sa Indioteria.
Curiosamente, dos días antes, la dirección de la empresa había
presentado una denuncia en el juzgado de instrucción número 4 de
Palma contra varios empleados que, presuntamente, se habían quedado
dinero de la recaudación de los autocares.
Desde el primer momento los investigadores policiales
sospecharon que esta denuncia podía estar relacionada con el
siniestro posterior, que devastó por completo dos vehículos de la
marca Man y afectó, además, al techo de uralita de la nave. La
policía ya ha visitado las instalaciones de la empresa y del
informe del Cos de Bombers, cuyos efectivos sofocaron las llamas,
se desprende que el fuego fue claramente intencionado. Esa noche un
vigilante se encontraba de guardia en la sede de los autocares,
pero una o varias personas consiguieron incendiar los vehículos de
transporte regular y darse a la fuga sin ser vistos.
Los daños son millonarios y según las fuentes consultadas
superan los 15.000.000 de pesetas. Este periódico intentó ayer
infructuosamente ponerse en contacto con los responsables de la
empresa Autocares Catalina Marqués, pero ninguno de sus directivos
quiso dar su versión de lo acontecido. Ayer tarde los dos autocares
'atacados' seguían estacionados en un pasillo del recinto, junto al
hangar. Los daños fueron tan elevados que ambos han sido declarados
siniestro total.
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