El gabinete de prensa del Cuerpo Nacional de Policía informó ayer
de la noticia adelantada por este periódico el pasado domingo, de
los presuntos malos tratos a un bebé de tres meses que estaba en
estado de coma en la UCI de Son Dureta. Según los informes de al
menos tres médicos las lesiones del bebé «son compatibles con malos
tratos infantiles» aunque por el momento no se ha practicado
ninguna detención, a la espera de la decisión de la autoridad
judicial que tiene en su poder los informes médicos y policiales.
La criatura presenta un cuadro clínico de «lesiones cerebrales
sugestivas de accidente asfítico agudo», lo que supone que podría
haber sido victima de intento de asfixia.
Los hechos ocurrieron el pasado día tres y en la información del
domingo se señalaba que el bebé estaba en estado muy grave en Son
Dureta. Desde entonces ha experimentado una ligera mejoría aunque
la previsión es que podría quedar de por vida en estado vegetativo
debido a la falta de oxigenación que sufrió su cerebro.
El Servicio de Atención a la Familia del Cuerpo Nacional de
Policía (SAF) investigó lo ocurrido por orden de dos juzgados de
Palma. Uno de los partes refleja la opinión de los médicos en el
sentido de que las lesiones del bebé pueden estar motivadas por
malos tratos. Los policía del SAF localizaron a la madre del bebé,
a la que se tomó declaración. La mujer dice que sobre las cinco de
la madrugada del día tres se despertó y comprobó que su hijo se
había caido de la cama. La mujer asegura que sólo advirtió 'una
rojez' en la mejilla de la criatura, de la que se recuperó
enseguida y se quedó dormido. Poco antes de las seis de la mañana
la madre declara que llegó a casa el padre del bebé, al que le
contó lo que había ocurrido, comprobando ambos que seguía
durmiendo.
La mujer continúa declarando que sobre las nueve de la mañana se
dio cuenta de que el bebé tenía 'la mirada como perdida' y que
respiraba con dificultad por lo que llamó a un familiar y éste a
una ambulancia, que lo trasladó al Materno Infantil de Son Dureta.
En el transcurso de la rueda de prensa el portavoz policial indicó
que, en contra de la versión de la madre sobre que el niño sólo
sufrió una caída, existen partes médicos en los que se señala que
el bebé sufre «lesiones hipodensas en ambos hemisferios
cerebrales». También en el transcurso de su declaración la mujer
dijo que aquella noche se había tomado tres pastillas de un fármaco
para dormir, pero no pudo aclarar la procedencia de las pastillas,
que no le fueron recetadas por ningún médico.
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