Un centenar de gendarmes buscaba ayer en las inmediaciones de
Thones (este francés) los restos de los cuerpos de los cinco
miembros de la familia Flactif, que desaparecieron en abril pasado,
tras la confesión del presunto asesino.
Un importante dispositivo que incluye expertos forenses y perros
policías se ha desplegado en la zona, donde el martes fueron
hallados en un bosque cercano restos de huesos calcinados «que
podrían ser humanos», según fuentes de la Gendarmería.
El hallazgo se produjo tras el interrogatorio de un vecino de la
familia, que confesó su «participación en la desaparición de los
Flactif» y reveló que los cuerpos fueron quemados antes de ser
enterrados y dónde habían sido escondidos. El presunto asesino fue
detenido el mismo martes junto a su mujer y otra pareja, todos
originarias de la región de Douai (norte), de la que también
procedía Xavier Flactif, lo que reactivó la investigación sobre un
caso del que hasta el momento apenas se disponía de información. El
promotor inmobiliario Xavier Flactif, su compañera Graziella y sus
tres hijos, Grégory, Sarah y Laetitia, fueron vistos por última vez
el pasado 11 de abril y en su chalé se encontraron restos de sangre
pertenecientes a los miembros de la familia.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.