Ayer cayó, tras cuatro meses de intensas investigaciones, la
llamada «banda del butrón», que la Guardia Civil relaciona con más
de 30 asaltos en naves industriales de Mallorca. A lo largo de
estos meses los kosovares que integraban esta organización han
obtenido botines por valor de 550.000 euros (más de 83.000.000 de
pesetas).
Durante los meses de mayo, junio y julio los «butrones» en
polígonos y urbanizaciones fueron continuos y la Policía Judicial
de la Guardia Civil montó controles nocturnos, con apoyo de
numerosas unidades, para desarticular la banda. La situación llegó
a ser muy complicada, ya que los robos se sucedían con el mismo
modus operandi y los delincuentes no dejaban indicios claros. Aún
así, desde el Grupo de Patrimonio se mantuvieron abiertas varias
líneas de investigación y ayer fueron apresados dos kosovares que
formaban parte de la «banda del butrón». Las diligencias siguen
abierta y la Benemérita seguía buscando, al cierre de esta edición,
a otros implicados. De momento les imputan una treintena de robos
por el procedimiento del «butrón» y, lo más llamativo, es que
durante todos estos asaltos robaron y causaron daños por valor de
550.000 euros, una cantidad muy elevada que da muestra de la
voracidad delictiva de esta organización.
En fuentes judiciales próximas al caso han destacado que la
operación no está cerrada y que el número final de robos imputados
a los kosovares puede aumentar en los próximos días, cuando se
completen los atestados, se tome declaración a todos los acusados y
se culminen los registros domiciliarios. Ayer ya se habían
recuperado una serie de efectos.
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